Desean cultivar caraotas
Un centenar de campesinos de Barinas se presentó ante las puertas de la hacienda La Chavera, propiedad de la familia presidencial, para exigir que parte de las tierras no cultivadas de ese latifundio les fueran adjudicadas para cultivar maíz y caraotas.
“¡Las tierras son del pueblo y no de la boliburguesía!” gritaban los campesinos mientras levantaban carpas para resguardarse de la fina lluvia que caía en ese momento. “Sabemos que la familia Chávez es muy generosa y nos va a dar un rinconcito para que podamos salir de la pobreza y el abandono en que nos dejó la oligarquía”, dijo una de los ocupantes. Una señora con un niño en los brazos rogó a los guardias que custodian la propiedad que los dejaran pasar al área de la piscina para que los jovencitos se pudieran asear y usar los baños.
Desde Caracas, el vicepresidente Elías Jaua advirtió a los campesinos que se alejaran de esas tierras que tenían dueño “desde la época de la Guerra Federal”.
“Yo no sé de qué guerra será eso, pero muchas de esas hectáreas fueron compradas desde hace cinco años para acá”, afirmó uno de los líderes de la toma. “El vicepresidente Jaua cayó por inocente”, y el lector también.
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