El dictamen lo emitió la Sala
Constitucional en julio pasado

Como un asunto que pertenece a la “esfera privada o intimidad económica de los funcionarios”. Así calificó la Sala Constitucional del Trobunal Supremo de Justicia a los sueldos y salarios de los empleados del Estado y por ello valió la actitud del contralor General de la República, Clodosbaldo Russián, de negarse a informar cuánto ganan él y los demás trabajadores de su despacho.

El pronunciamiento lo emitió la intérprete de la Carta Magna, en su sentencia 745, fechada el pasado 15 de julio y en la cual respondió un amparo interpuesto por la organización Espacio Público, la cual se dedica a promover la libertad de expresión y el acceso a la información pública.

En el fallo, redactado por la magistrada Carmen Zuleta de Merchán, la Sala justificó su postura contraria a obligar la difusión de los ingresos de los funcionarios públicos, indicando que el accionante “no acredita cómo la información solicitada sería de utilidad para la participación ciudadana en pro de la transparencia de la gestión pública”.

Este dictamen tiene carácter vinculante, por lo que todos los jueces del país estaban en la obligación de sentenciar en los mismos términos so pena de sanción.

El contralor Russián, en entrevista a este diario concedida en marzo de 2009, justificó su negativa a informar cuánto ganan los funcionarios indicando que esto podría colocarlos en riesgo de ser secuestrados.

JUAN FRANCISCO ALONSO | EL UNIVERSAL
jueves 30 de diciembre de 2010