Aún hay viviendas sin techo
y con paredes dañadas
■ Están sin terminar las reparaciones a 10 meses de la explosión en Cavim.
■ 3.700 casas de varios sectores presentaron daños y en algunas cayeron restos de morteros y granadas.
Habitantes del sector José Félix Ribas, al oeste de Maracay, una de las zonas más afectadas por la explosión ocurrida el 30 de enero en los depósitos de la Compañía Anónima Venezolana de Industria Militares, denunciaron que los trabajos de reparación de sus viviendas quedaron inconclusos y los pocos realizados fueron mal ejecutados.
Los Gobierno nacional y regional se comprometieron a reparar las viviendas que sufrieron daños significativos por la onda expansiva.
A casi un año del hecho, el panorama no es diferente.
De las 196 casas que están en la perimetral 2 del sector 5, al menos 40 quedaron a medio terminar y los trabajos ejecutados presentan irregularidades.
Vecinos de los sectores José Félix Ribas y La Coromoto, ambos cercanos a Cavim, aseguraron que todavía hay casas que no están en condiciones de ser habitadas.
A consecuencia de la explosión, 3.700 viviendas de los sectores La Coromoto, José Félix Ribas, Caña de Azúcar y Tapa Tapa presentaron daños y en algunas cayeron restos de morteros y granadas.
En algunas casas en las que aún no han terminado de reparar las paredes, el cableado eléctrico está expuesto.
Otras aún no le han terminado de colocarle los techos.
A los vecinos que piden que sean restituida sus viviendas como lo tenía antes de la explosión, les dicen que el uso de asbesto es un lujo. “Queremos tener nuestras casas en buenas condiciones. No tenemos culpa de la explosión en Cavim”, dijo Lisset Uzcari, habitante del sector.
La comunidad amenaza con realizar acciones de calle si en los próximos días el gobernador Rafael Isea no cumple con el compromiso de reparar los inmuebles.
Afectados:
La vivienda Uzcari fue una de las que demolieron y construyeron nuevamente, pero a medias, pues aún no tiene ventanas y el cableado eléctrico está expuesto.
Debido a la explosión, una pared de su casa quedó inestable. La misma fue derriba por los trabajadores encargados de repararla, y a dos meses de haber culminado el trabajo, se volvió a caer.
Johan Marinque, cuya casa también se vio afectada, expresó que el Gobierno regional no ha cumplido cuando les prometió que en tres meses sería solventada la situación. “Llevamos casi un año y ningún funcionario del Ejecutivo nos ha dado la cara para que diga cuál es la solución”, dijo.
Ángel Márquez, encargado de la empresa regional Aragua en Marcha, designada para ejecutar los trabajos, aseguró que antes del mes diciembre culminarían las reparaciones que faltan.
El presidente Hugo Chávez aprobó 80 millones de bolívares más para seguir con las reparaciones de las viviendas afectadas por la explosión.
Marinque comentó que a los afectados les dicen que hay retrasos porque no tienen presupuesto, mientras que Isea les manda a decir que tengan paciencia.
Por: LAUDELYN SEQUERA
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EL NACIONAL
