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    HomeActualidadUCV: Oficialistas destruyen patrimonio del mundo

    UCV: Oficialistas destruyen patrimonio del mundo

    El edificio donde se encuentra la oficina de la Federación de Centros Universitarios refleja en su fachada los daños.

    En la entrada del Rectorado, recuperada en
    2009, se dañaron puertas, paredes y pisos

     

    Ganó la universidad y la autonomía.

    Responsabilizan al Gobierno de la violencia en la UCV.

    La rectora García Arocha reprochó la falta de respuesta de los Poderes Públicos.

    7 de diciembre destruyeron un baño en la facultad de Derecho por explosión de niple.

    Espacios de la UCV recuperados en 2009 y 2011 sufrieron daños el pasado viernes.

    Las lámparas de la rampa este, reinaugurada en marzo pasado –tras 30 años de clausura– también fueron destruidas.

    Ayer el Consejo de Preservación y Desarrollo de la UCV supervisaba los daños y elaboraba un informe para estimar el costo que tendrá su reparación,
    tras los sucesos violentos del viernes en la noche.

    9 de diciembre prendieron fuego a la entrada 4 del Aula Magna; dañaron un baño de los camerinos, donde rompieron el ducto de ventilación. Destruyeron lámparas de la rampa Este del sótano que da a la galería, en la Plaza Cubierta; quemaron las puertas de la planta baja del Rectorado y las escaleras perdieron cientos de mosaiquillos originales.

    Hace apenas tres años fue rehabilitada la planta baja del Rectorado, hoy en ruinas. La pérdida de piezas únicas y difíciles de reemplazar, como los mosaiquillos de la pared de la escalera de ese lugar, ponen en peligro la preservación de la originalidad de la ciudad universitaria, declarada Patrimonio de la Humanidad en 2000.

    La destrucción de un baño en la escuela de Derecho ocurrida el siete de diciembre tras la explosión de un niple fue, quizá, la antesala a los hechos que, dos días más tarde, sorprendieron a quienes vieron en llamas las puertas del Aula Magna y la entrada del edificio del Rectorado. Y es que fue ese el efecto no deseado de las elecciones de gobierno y cogobierno estudiantil, en donde la violencia provocó que la jornada cerrara entre fuego, disparos, gases lacrimógenos y gritos.

    Los ataques políticos también se manifiestan en graffitis.

    Pasado el alboroto, el balance no es positivo para la Ciudad Universitaria de Caracas, un espacio que alberga 107 obras de artistas plásticos y 40 edificaciones declaradas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. “Estamos elaborando el informe para estimar los daños y el costo de las reparaciones”, explica la directora del Consejo de Preservación y Desarrollo (Copred) de la UCV, María Eugenia Bacci. 

    Es en esta oficina donde 40 profesionales trabajan por la conservación del legado de Carlos Raúl Villanueva, reconocido como “obra maestra del urbanismo moderno, la arquitectura y el arte y ejemplo sobresaliente de la coherente realización de los ideales urbanos de principios de siglo XX”, según los criterios de la Unesco.

    Por su antigüedad, edificios pierden los azulejos. En la entrada del Rectorado, recuperada en 2009, se dañaron puertas, paredes y pisos

    Fue en enero de 2009 cuando se recuperó la planta baja del Rectorado, espacio en el que hoy no hay más que puertas en ruina, manchas de humo y un gran espacio blanco en la pared de las escaleras que da cuenta de los cientos de mosaiquillos auténticos perdidos. “Estamos perdiendo lo original del área”, advierte Bacci.

    El 22 de octubre de este año se entregó la sala del Aula Magna con restauraciones de alfombras, madera del escenario, así como arreglos en el sistema mecánico y tapicerías de las butacas que están en el nivel patio; espacios que no sufrieron daños pese al intento de ingresar por la puerta cuatro que hicieron los violentos.

    También se registraron daños en un baño de los camerinos donde, tras romper un ducto de ventilación, lanzaron una bomba lacrimógena. Todo sin contar la destrucción de las lámparas de la rampa Este que da acceso a la galería ubicada en el sótano del Aula Magna, pasillo inaugurado en marzo de 2011 tras 30 años de clausura. “Tenemos motivos suficientes para que la conservación del patrimonio trascienda cualquier ideología”, agrega Bacci.

    Planta baja del Rectorado muestra los resultados de la violencia.

    A los hechos de violencia se suma el daño cotidiano provocado en paredes y obras limpias con grafitis y afiches pegados con engrudo, como se ve en el pasillo entre Humanidades y Faces; así como el deterioro de pisos por el tránsito de motos, bicicletas y patinetas en áreas concebidas para peatones. “Mucho de lo que pasa es por el desconocimiento que la gente tiene de los espacios. Hacemos esfuerzos pero cuidarlos depende de todos”, puntualiza Bacci.

    No pasa por alto el deterioro provocado por el tiempo que se registra en fachadas como la de la Biblioteca Central, donde cada día se pierden mosaiquillos.

    La recuperación de áreas implica inversión de recursos, implementación de mano especializada (cada vez más escasa), y la obtención de materiales de la época para preservar la autenticidad del patrimonio.

    “Si para mí la UCV es mi casa, el Aula Magna es mi cuarto. Cada ladrillo tiene un valor y no se puede llamar ucevista ni venezolano quien esté dispuesto a destruirla”, dijo Helen Romero quien coordina a los 37 estudiantes que fungen como guías de sala. En “la casa que vence la sombra” la batalla es contra el desconocimiento de su valor cultural y arquitectónico, pero sobre todo contra la indiferencia.

    Grafitis y afiches pegados con engrudo deterioran paredes con azulejos y columnas de concreto.

    Ganó la universidad y la autonomía:

    Terminó la espera. La Comisión Electoral de la UCV anunció los resultados finales de las elecciones para el cogobierno universitario (Consejo Universitario) y para la Federación de Centros Universitarios (FCU).

    En la primera escogencia la plancha Viva la U con 11.780 votos obtuvo un representante ante el Consejo Universitario (CU). Presupuesto Justo logró 9.932 votos y sacó un vocero y por último 100% Unidad y Gestión logró sumar 8.708 sufragios y también obtuvo un puesto ante el CU. La estudiante Pinto Ariana, con 3.316 votos, fue escogida como integrante la Comisión Central de Extensión

    En cuanto a la FCU, Juan Requesens (Viva la U), logró la presidencia con un total de 4.411 votos y el actual presidente, Diego Sharifker (100% Unidad y Gestión) contabilizó 3.171 votos.

    La presidenta de la Comisión Electoral Estudiantil, Estefanía Marrón, señaló que si bien falta escrutar las papeletas de los núcleos de Puerto Ayacucho y Barquisimeto, pero al ser pocos votos los resultados son irreversibles.

    Por su parte, Tony Chacón, presidente de la Comisión Electoral, se mostró satisfecho porque 45% de los electores participaron.

    Aclaró que el proceso es legítimo, y que sólo se repetirá, el miércoles, las elecciones en las Escuelas de Comunicación Social y Trabajo.

    Al oficializarse su triunfo Juan Requesens, dijo que ganó la UCV y su autonomía. Su gestión se enfocará en resolver los problemas y fortalecer la participación de todos los sectores desde los centros de estudiantes.

    Los ucevistas salieron en defensa de la institución y exigieron el cese de los ataques. La rectora García Arocha reprochó la falta de respuesta de los Poderes Públicos.

    Violencia del gobierno en la UCV:

    Pasó, por ahora, el temblor y autoridades, estudiantes, docentes y empleados se reunieron este lunes para observar los destrozos y rechazar la ofensiva contra la Universidad Central de Venezuela (UCV).

    El acto en “desagravio a la violencia” se celebró frente a la puerta de acceso al edificio del rectorado. En el fondo la pared ahumada, por el fuego, y los vestigios del inmobilario recordaron la furia que desplegaron los encapuchados que asaltaron el proceso de escrutinios.

    El secretario general de la Asociación de Profesores de la UCV, Héctor Moreno, parlante en mano, espetó. “La UCV no se rinde ante la violencia. Estamos aquí para defenderla de la barbarie”. Seguidamente los presentes entonaron el himno del Alma Mater.

    Al tomar la palabra la rectora, Cecilia García Arocha, reprochó la pasividad del Gobierno para dar con los responsables de los cuarenta (40) actos vandálicos cometidos en los últimos tres años. “Más que violencia son actos terroristas. Es una situación insostenible. Gobierno, póngale punto final a la violencia. Ustedes son responsables por no investigar y detener a los culpables”.

    El viernes a las 8:30 p.m. durante el conteo de los votos de la Escuela de Trabajo, que indicaban la derrota del estudiante Kevin Ávila, un grupo de motorizados, con disparos y bombas lacrimógenas, se abrió paso en la plaza cubierta del rectorado y subió a la mezzanina del Aula Magna para robar y destruir las máquinas totalizadoras, quemar las boletas y las actas. Durante el ataque incendiaron la entrada del recinto y del edificio del rectorado. De esa manera concluyó una jornada de violencia que se inició en la mañana con el lanzamiento de bombas, niples y disparos.

    Para la rectora más que atacar a las autoridades se vulnera la institucionalidad de la UCV y aprovechó la ocasión para recordar que en todo momento han colaborado con las autoridades para hallar a los responsables.

    Luego los manifestantes se acercaron al Aula Magna donde el presidente de la Apucv, Víctor Márquez, instó a todos los sectores sumarse al rechazo y frenar la violencia.

    El día antes de las elecciones el carro de la Secretaría fue incendiado. El 15 de noviembre fueron incendiados otros dos carros asignados al rectorado.

    Seguidamente, con las autoridades encabezando la marcha, los manifestantes recorrieron parte del campus con la pancarta “La UCV no se rinde”.

    El secretario de la UCV, Amalio Belmonte, sostuvo que la intención de los encapuchados era que las elecciones fueran declaradas ilegales, pero gracias al resguardo del material por parte de la Comisión Electoral se salvaron las actas de votación de las escuelas a excepción del caso de Trabajo Social.

    “Los estudiantes defendieron sus elecciones y la UCV reafirmó su autonomía”, puntualizó Belmonte.


    Por: ANYIMAR COVA LUGO
    acova@eluniversal.com
    EL UNIVERSAL
    martes 13 de diciembre de 2011

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