Cortes no programados afectan vida
de habitantes y comerciantes
■ Las principales quejan son por alimentos dañados y equipos que sufren averías.
Ninguna entidad se salva. Hay apagones de 30 minutos frecuentes en estados como Miranda hasta los que se extienden por varios días como los que se han reportado en Anzoátegui. En Táchira, las comunidades de la montaña como San José de Bolívar y aldeas aledañas en el municipio Francisco de Miranda pasaron recientemente hasta 24 horas sin servicio, lo que afectó sus actividades cotidianas.
La vida de Carmen Acevedo está en riesgo, ya que los cortes de energía eléctrica por segunda vez en 15 días afectaron el funcionamiento del equipo con el que se realizan las sesiones de radioterapia en el Hospital Central de San Cristóbal: “Me dicen que no tienen la culpa porque los aparatos están dañados”. Cerca de 195 pacientes que necesitan ese tratamiento viven la misma situación.
Diariamente, el servicio recibe entre 5 y 10 solicitudes de pacientes. De momento, se hacen gestiones ante la empresa en Caracas para adquirir los repuestos en Alemania.
En Zorca, en la vía que desde El Mirador conduce a Capacho, los cortes eléctricos no programados se han extendido por más de 12 horas. La situación se repitió en Coloncito y Colón al norte de Táchira, San Antonio, Ureña y Rubio en la frontera y en San Josecito y Abejales al sur del estado.
El alcalde del municipio Francisco de Miranda, Yordi Sánchez, informó que el trabajo de oficina se ha retrasado por los apagones, y que Corpoelec no ha realizado los trabajos de mantenimiento necesarios. “Ha llovido mucho con viento, y cuando las guayas rozan con los árboles nos quedamos sin electricidad”, dijo Sánchez.
De acuerdo con informaciones extraoficiales, las plantas generadoras de energía eléctrica en Táchira estarían operando a menos de 50%, como es el caso de la Hidroeléctrica de San Agatón, que tiene capacidad para 300 megavatios pero sólo produce 120 MW, o en la Planta Termoeléctrica Táchira, que tendría capacidad para generar 248 MW, sólo produciría 50 MW.
Carabobo a oscuras:
Los cortes no programados, que se presentan cada vez con más frecuencia, ocasionan molestia.
Los dos municipios más afectados han sido los de la costa, como Puerto Cabello y Juan José Mora, debido a lo extenso de los períodos sin luz. También están afectados los habitantes de Guacara, Naguanagua, Los Guayos, Valencia, Carlos Arvelo y San Diego.
El sábado pasado se presentaron varias fallas en la subestación Morón. Ese día en la tarde en Juan José Mora se quedaron sin luz durante 14 horas y en Puerto Cabello cerca de 20 horas. En esta ciudad se restableció el servicio el domingo al mediodía.
El fin de semana, varias zonas de Valencia, San Diego y Naguanagua se quedaron sin luz durante seis horas. En esta última localidad no se conoció el origen de la falla, que se repitió por unas dos horas el domingo. En Guacara y en Los Guayos, el lunes y el martes en la noche, vecinos salieron con cacerolas a protestar.
Más pérdidas:
En el barrio Andrés Bello, al sur de Valencia, reportan apagones dos o tres veces al día. “Se fue el lunes y martes en la noche. En ocasiones debemos esperar hasta el día siguiente”, dijo Marilín Riera.
José Niño, de Puerto Cabello, indicó que el negocio de comida en el que trabaja sufrió pérdidas porque se dañaron 800 tequeños por falta de refrigeración.
Leonor Luengas, de La Trigaleña en Valencia, dijo que por lo general los cortes ocurren después de las 8:00 pm y duran hasta tres horas. Se le dañó la máquina de coser que es su fuente de ingresos y el calentador del agua: “Estar sin luz es prácticamente no poder hacer nada. Cuando se va de noche hay que irse a dormir, y si es de día, poco se puede hacer”.
En Guanare exigen cronograma:
Como ocurrió hace dos años, cuando los niveles de la represa del Gurí llegaron al mínimo, el estado Portuguesa ha sido sometido durante los últimos 30 días a un régimen de racionamiento eléctrico intercalado con apagones sin aviso y fallas generadas por la lluvia.
Los habitantes de la entidad protestaron en las calles pero las fallas continúan.
Por ello exigen un cronograma de racionamiento y que las autoridades dejen de negar que se está aplicando un racionamiento.
Julio Manuel Colmenares, vocero del Consejo Comunal del barrio Maturín en Guanare, señaló que en el sector II de la zona se va más la luz que en el sector I, y que normalmente ocurre en la tarde o en la noche. Dijo que los más afectados son los comerciantes locales, que se ven obligados a cerrar, por lo que generan pérdidas.
“Si es de noche, cierran por la inseguridad. Si es de día, por el calor que es muy fuerte. Además, los dueños de los locales se quejan porque se les han dañado equipos y nadie les responde. Como son locales pequeños no tienen capacidad para comprar plantas eléctricas que les ayuden a soportar la crisis”, dijo.
Cergio Cuevas, abogado que vive en el sector La Arenosa Centro, dijo que en la zona hay apagones en las mañanas y en las tarde, y que la situación le impide trabajar porque no puede usar su computadora.
Comentó que cuando no hay luz en la sede de la compañía de cable, no hay señal en Guanare y no puede ver los canales extranjeros. Cuevas dijo que el suministro de agua potable también es afectado porque en la mayoría de las casas tienen bombas eléctricas.
De acuerdo con un sondeo realizado entre los vecinos, los sectores Colombia Norte, barrio Sucre, La Peñita, Guicaipuro, Buenos Aires, Centro, Arenosa, Maturín, Progreso, Los Pinos, Hato Modelo, La Comunidad, Fundaguanare y Los Próceres son los más afectados, donde se registran apagones de hasta tres horas.
POR: ELEONORA DELGADO
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EL NACIONAL
LUNES 04 DE JUNIO DE 2012
