Aniversario de su llegada al poder

■ Casi todo ha cambiado en Venezuela desde que Chávez gobierna.

■ Chávez, hospitalizado en La Habana, lucha por superar un cáncer.

■ Desde su primer día, el mandatario marcó su hoja de ruta política.

■ El país lidera un movimiento panamericano contra el ‘Imperio’ de EEUU.

El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, expresó este lunes que “la lucha del 4 de febrero aún no ha terminado. Hoy estamos obligados a ser como Chávez (…) como los hombres y mujeres que ofrecieron su vida por libertar a esta patria”.

“Aquel 4 de febrero surgió una voz, una imagen, un líder, un ser humano excepcional”, acotó Cabello cuando citó las palabras que dijo Hugo Chávez cuando asumió la responsabilidad de los hechos: “Le habló al pueblo a los ojos, esa responsabilidad y ese ‘por ahora’ retumban en el pueblo (…) y la lealtad no tiene gradaciones, o somos leales o no. Estamos obligados a ser leales con el presidente Chávez, con su pensamiento, palabra y acción”.

Manifestó que “desde aquí le enviamos un abrazo solidario, revolucionario de todo el pueblo venezolano, de sus soldados, sus oficiales, mujeres y hombres de armas, de sus ministros, de los diputados de la AN. Presidente Chávez aquí está su pueblo en la calle, lo queremos y lo amamos y seguimos orando por su salud”.

De igual forma, Cabello sentenció: “Quien se salga de las líneas de instrucciones del comandante Chávez el pueblo se las va a cobrar, quien crea que va aprovechar ahora para sacar del baúl de los recuerdos aquellos viejos intereses y ponerlos ahora en la mesa porque el comandante está convaleciente se va a equivocar. Hoy más que nunca el pueblo venezolano está alrededor de su Comandante en Jefe”.

El comandante golpista:

“Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando, convoca a la soberanía nacional para que ejerza su verdad absoluta”. Hace hoy justo 14 años, el 2 de febrero de 1999, el recién juramentado Hugo Chávez iniciaba su discurso presidencial con una frase de su idolatrado Simón Bolívar. El comandante golpista eligió aquel momento histórico para marcar su hoja de ruta política: decretó la muerte de la antigua Constitución y empleó sólo tres veces la palabra revolución.

Casi todo ha cambiado hoy en Venezuela. También en América Latina. La Revolución bolivariana liderada por Chávez controla todos los poderes del estado caribeño, impone el llamado socialismo del siglo XXI, lidera un movimiento de integración panamericano y lleva la voz cantante contra el odiado ‘Imperio’ de EEUU.

Todo ello se mantiene hoy pese a que han transcurrido 56 días desde la última aparición pública del líder bolivariano. Operado de urgencia y por cuarta vez en un hospital habanero, Chávez se debatió entre la vida y la muerte durante semanas. La cúpula del oficialismo venezolano llegó a temer por su desaparición física. El mandatario venezolano mantiene un pulso contra el cáncer, que se prolonga 20 meses.

Nicolás Maduro, nombrado a dedo por el propio Chávez como su sucesor, repite que “más temprano que tarde”, el presidente volverá a Caracas para juramentarse y para proseguir su batalla contra el cáncer. El vicepresidente insistió anoche que Chávez ya ha entrado en “una nueva fase de tratamiento”, lo que le acercaría más a su retorno en Venezuela.

Incluso el Hospital Militar de la capital, donde ya recibiera tratamiento el año pasado, es acondicionado desde hace un par de semanas. “Va recuperándose paulatinamente, tomando fuerza. Lo que nunca le falla al presidente es el ánimo, la voluntad más vital de estar entre nosotros, su sonrisa”, añadió Maduro.

¿Y Venezuela? El país sudamericano vive a la espera de su presidente sumando distintas emociones: desde la expectación hasta el temor pasando por la perplejidad y la protesta. Chávez no está en cuerpo, pero si en alma, convertido en un símbolo “de amor”, como repiten incansablemente televisiones, periódicos, radios y portavoces gubernamentales.

Ex ministro iraní con cheque venezolano:

Berlín, 03 de febrero. DPA.- Un iraní detenido al intentar entrar en Alemania con un cheque millonario del Banco de Venezuela es el exministro de Finanzas iraní Tahmasb Mazaheri, aseguraron hoy medios alemanes.

Un ex ministro iraní acaba de ser detenido en Alemania con un cheque venezolano por el equivalente de $70 millones. Ello indica corrupción galopante en el régimen que supervisa Raúl Castro. Ningun gobierno transparente y responsable emite un cheque por esa inmensa cantidad de dinero para que un barbudo cualquiera vaya a depositarlo en Alemania. Es que acaso Venezuela es una quincalla o una cantina militar? Venezuela tuvo mayor desarrollo económico y social que Chile o Corea del Sur. Hoy, la corrupción de la pandilla que está en el poder nos tiene al nivel de Haití o de los países africanos.(GC).

Según la edición dominical del diario “Bild”, funcionarios de aduana del aeropuerto de Düsseldorf encontraron el cheque por 300 millones de bolívares venezolanos (unos 54 millones de euros o 70 millones de dólares) en el equipaje de Mazaheri cuando intentaba entrar a Alemania procedente de Turquía el 21 de enero.

El también ex jefe del banco central iraní, de 59 años, explicó que el cheque era para financiar la construcción de 10.000 viviendas por parte del gobierno de Venezuela, añadió el dominical.

Mazaheri podría ser acusado por evasión de declaración de bienes al ingresar en Alemania. Además, según “Bild”, la policía y la aduana alemanas investigan un posible caso de lavado de dinero.

El iraní fue ministro de Finanzas de 2001 a 2004 y jefe del banco central en Teherán de 2007 a 2008.

Capriles pide explicaciones sobre lo ocurrido con el exministro iraní

Por su parte, el Gobernador del estado Miranda en Venezuela, Henrique Capriles Radonski, pidió una explicación sobre lo ocurrido con el exministro iraní a través de su cuenta en la red social Twitter.

“Qué explicación nos dará a los venezolanos el Gobierno sobre lo ocurrido con este Ex Ministro Iraní?”, escribió Capriles.

Episodios nacionales:

Todo es posible en la Venezuela del surrealismo mágico, como demuestran otros episodios nacionales vividos en las últimas semanas y que todavía repercuten en la sociedad. ELMUNDO.es ha reunido algunos de ellos:

-Masacre en la cárcel de Uribana: ni siquiera en la cifra de muertos se ponen de acuerdo el Gobierno (59) y las ongs (62). Pero transcurrida una semana de la sangrienta intervención militar en el penal de Lara, las imágenes del horror no han desaparecido. Hacinamiento crítico (casi 32.000 presos de más), reos armados hasta los dientes gracias a la corrupción de sus vigilantes y juicios que se celebran con años de retraso desnudan la incapacidad de la Revolución para lidiar con la quiebra del sistema penitenciario. Desde que Chávez llegara al poder, 6.500 personas han muerto en las cárceles. ONU, Amnistía Internacional, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y Human Rights Watch han denunciado la responsabilidad del estado venezolano. El Gobierno prefirió acusar a los medios de comunicación, una estrategia constante en Venezuela.

-La conspiración permanente: el oficialismo, que durante estos 14 años ha denunciado más de 20 intentos de magnicidio contra Chávez sin aportar pruebas, ha repetido la misma estrategia, pero con distintas “víctimas”: Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea y vicepresidente del PSUV. Se acusan a fuerzas oligarcas, ultraderechistas, incluso a paramilitares colombianos. Nada se conoce desde la denuncia.

-Desabastecimiento alimentario: Una panadería sin pan. Parece una locura, pero Caracas y zonas del interior del país llevan varias semanas sufriendo problemas en el abastecimiento de productos básicos, desde la harina hasta el aceite, pasando por el pollo, la carne o la sal. El Gobierno acusa a empresas privadas de acaparar estos precios, que están regulados. ·Se genera por las políticas económicas inadecuadas·, aclara Luis Vicente León, presidente de Datanalisis. Mecanismos de control extremo, amenaza y hostilidad frente a los productores resumen estas políticas.

La hija del preso político:

Ivana, con sólo 15 años, se atrevió a dirigirse con una carta llena de lágrimas a los “señores del estado venezolano”. En ella, la niña reclamaba la libertad de Iván Simonovis, comisario de Caracas condenado a 30 años de prisión por los hechos violentos que precedieron al golpe de estado de Abril de 2002. “Sufrir cansa. Llorar cansa. Extrañar al padre de uno cansa. Siento que soy demasiado joven para estar tan cansada”, confesó Ivana en su misiva. Y no es para menos. Su padre, gravemente enfermo de osteoporosis, permanece desde hace 8 años en una celda de 2×2 metros. En todo este tiempo, sólo ha disfrutado de 15 días para tomar el sol en el patio.

Pero Nicolás Maduro no se conmovió, su respuesta fue así de contundente: “La ley tiene que caer con todo su peso sobre esos criminales. No puede haber impunidad”. El vicepresidente olvida que el exmagistrado Eladio Aponte, el juez estrella del chavismo, comparado en su tiempo con Baltasar Garzón, confesó al huir a EEUU que el gobierno había teledirigido la sentencia contra el comisario. Simonovis es, junto a la jueza María Afiuni, uno de los presos políticos más emblemáticos de la Revolución Bolivariana.

Por: Daniel Lozano
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