La Gran Misión “Billete en
Revolucion” se acabó..
■ Muy rápido el gobierno revolucionario en esto de atender la urgencia de la crisis económica.
La eficiente revolución, con los cubanos colgando de sus espaldas, ha tardado una eternidad en tomar las acciones que todo el mundo sabe debe tomar para medio emparejar la economía que ellos mismos destruyeron. Mientras el fallecido estuvo cómodo con la plata que venía del imperio para cubrir el altísimo costo interno de limosnas y migajas, sus regalos a los gobiernos que le jalaban, para los vividores cubanos o mandando maletines llenos de verdes en efectivo con el ministro “largo” para Argentina; no había mayores problemas.
El estafador supremo estaba cómodo. Plata en forma de limosna para los pobres, plata para propaganda, plata para los chuletas del mundo y el Foro de Sao Paulo, plata para los desestabilizadores de gobiernos considerados enemigos, plata para las FARC y en dólares, plata para los artistas famosos que se viven al país, plata para corredores de carros y ministros necesitados, plata para mover a las masas desde el último rincón para sus marchas en carroza, plata para comprar armas y comisiones, plata para los opinadores tarifados de la vieja izquierda enquistada. Plata para robar, plata para pilotos de F1 más malos que un ataque de asma en el Pico Bolívar. Plata para cantantes, novios y hasta maridos del clan. Solamente con la plata que se han llevado los cubanos habría harina y papel tualet en lo que queda de este potrero llamado Venezuela.
Pero el largo período de la Gran Misión Billete Revolucionario se acabó para el soberano mantenido con bequitas o esperando en refugios. Los dueños de La Habana se llevaron todos los dólares y dejaron la botija tipo Lusinchi, vacía y hedionda a comunismo. Llegó el chavismomadurismocastrismoladrón al llegadero. Hasta los más cándidos ministros y las más nudistas de las ministras andan en jugadas millonarias. Pero ya no hay vuelta. Hay que tomar medidas urgentes. Va, entonces, una pequeña lista de sugerencias para que no causen demasiadas rabias en los hechizados votantes de la revolución.
Se entregará una sombrilla a cada ciudadano para protegerse del sol mientras hacen la cola del papel. Se regalarán banquitos para no esperar parados. Se permitirá a los motorizados unirse a los buhoneros como fuerza de venta de productos regulados. Se ampliará el otorgamiento de divisas a corredores de motos, F1, carruchas y patinetas. Para quienes necesiten un poco más de patria se crearán centros de distribución especial que entregarán pedazos de patria los sábados y domingos y feriados. El gobierno desarrollará en el IVIC el primer papel tualet reversible y reusable del mundo. Definitivamente el trueque es la salida para el problema de falta de divisas: cambio gato por liebre.
Por ahora ganan los cubanos.
Por: ELIDES J. ROJAS L.
erojas@eluniversal.com
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EL UNIVERSAL
miércoles 23 de octubre de 2013
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